La asimetría informativa es un concepto clave en economía que nos sirve para explicar la actual crisis financiera que estamos sufriendo. Existe información asimétrica cuando una de las dos partes tiene más información que la otra. Así de fácil. Y eso es justo lo que ha estado ocurriendo para llegar a donde hemos llegado. Lo explicaba el Nobel de Economía Joseph Stiglitz en una entrevista que le hicieron recientemente:
“Las pérdidas de las instituciones financieras europeas por las hipotecas subprime han sido más grandes que en Estados Unidos. El hecho de que Estados Unidos diversificara estos valores con garantía hipotecaria entre tenedores de todo el mundo –gracias a la globalización de los mercados– ha suavizado realmente el impacto en el mismo Estados Unidos.
Algo que se está entendiendo ahora como resultado de la crisis es la asimetría informativa de la globalización. En Europa, por ejemplo, no se entendía que en EE.UU. el deudor de una hipoteca podía abandonarla y devolver las llaves al banco si el valor de la casa bajaba respecto a la deuda. En Europa, la casa es un colateral, pero el prestatario continúa comprometido por la cantidad que pidió prestada sin importar nada. Ese es uno de los peligros de la globalización: el conocimiento es local porque uno sabe mucho más de su propia sociedad que otros ”.
[Esto me recuerda aquella cita que dice “un economista es un experto que sabrá mañana por qué lo que se predijo ayer no ha sucedido hoy”].
La situación en la que nos encontramos la podemos explicar con un ejemplo muy simple: la venta de coches usados. ¿Cuánto estaríamos dispuestos a pagar por un coche si no somos capaces de saber en qué estado se encuentra? Steve D. Levitt lo describía perfectamente en su obra “Freakonomics”. El momento que un coche sale del concesionario es en el que pierde más valor, alrededor de una cuarta parte. ¿Por qué? Porque consideramos que la única persona que vendería un coche recién comprado es alguien que ha descubierto que es un cacharro. Aunque no lo sea, el comprador potencial lo da por sentado. En este caso la asimetría informativa castiga al vendedor, ya que el comprador considera que el vendedor posee una información que él ignora. Para evitar esto el vendedor deberá ofrecer ciertas garantías. Pero aún así, ¿quién se fía?
¿Y si resulta que ciertamente es un cacharro? ¿Qué podría hacer el vendedor? Fácil: esperar hasta que las sospechas desaparezcan. Si espera un tiempo hasta que otros muchos vendan su coche que habían comprado anteriormente en perfecto estado, el cacharro pasará inadvertido y lo venderá por más de lo que vale. ¿Os huele a hipoteca basura?
Steve D.Levitt también plantea un aspecto muy interesante en ‘Freakonomics’, y es que la irrupción de Internet ha perjudicado la asimetría informativa. Hoy en día cualquiera de nosotros puede acceder a la información que puede interesarnos ya que Internet ha reducido la distancia entre expertos y público. Cada vez resulta más difícil usar la información privilegiada por parte de los expertos, que hasta ahora la utilizaban en detrimento de nosotros. Después de escuchar la oferta del vendedor de coches, podemos navegar por Internet en nuestra casa y averiguar hasta qué punto la compra no sería tan buena.
Pero como podemos comprobar en estos días, herramientas como Internet no han evitado la asimetría informativa que ha provocado esta crisis. Hipotecas basura, deudas encubiertas, doble contabilidad, activos inflados, manipulación de mercados, ocultación de honorarios,... Los culpables de la actual crisis han ocultado información verdadera y difundido otra falsa, haciendo todo lo posible para que la asimetría informativa se mantuviera cuanto más asimétrica mejor. ¿Soluciones posibles? Supongo que establecer mecanismos para que todos tengan las mismas oportunidades para acceder a la información, y que esta sea lo más veraz posible. Y creer en esto es como creer en el título de aquella película de Manuel Summers: “To er mundo e güeno”.
“Las pérdidas de las instituciones financieras europeas por las hipotecas subprime han sido más grandes que en Estados Unidos. El hecho de que Estados Unidos diversificara estos valores con garantía hipotecaria entre tenedores de todo el mundo –gracias a la globalización de los mercados– ha suavizado realmente el impacto en el mismo Estados Unidos.
Algo que se está entendiendo ahora como resultado de la crisis es la asimetría informativa de la globalización. En Europa, por ejemplo, no se entendía que en EE.UU. el deudor de una hipoteca podía abandonarla y devolver las llaves al banco si el valor de la casa bajaba respecto a la deuda. En Europa, la casa es un colateral, pero el prestatario continúa comprometido por la cantidad que pidió prestada sin importar nada. Ese es uno de los peligros de la globalización: el conocimiento es local porque uno sabe mucho más de su propia sociedad que otros ”.
[Esto me recuerda aquella cita que dice “un economista es un experto que sabrá mañana por qué lo que se predijo ayer no ha sucedido hoy”].
La situación en la que nos encontramos la podemos explicar con un ejemplo muy simple: la venta de coches usados. ¿Cuánto estaríamos dispuestos a pagar por un coche si no somos capaces de saber en qué estado se encuentra? Steve D. Levitt lo describía perfectamente en su obra “Freakonomics”. El momento que un coche sale del concesionario es en el que pierde más valor, alrededor de una cuarta parte. ¿Por qué? Porque consideramos que la única persona que vendería un coche recién comprado es alguien que ha descubierto que es un cacharro. Aunque no lo sea, el comprador potencial lo da por sentado. En este caso la asimetría informativa castiga al vendedor, ya que el comprador considera que el vendedor posee una información que él ignora. Para evitar esto el vendedor deberá ofrecer ciertas garantías. Pero aún así, ¿quién se fía?
¿Y si resulta que ciertamente es un cacharro? ¿Qué podría hacer el vendedor? Fácil: esperar hasta que las sospechas desaparezcan. Si espera un tiempo hasta que otros muchos vendan su coche que habían comprado anteriormente en perfecto estado, el cacharro pasará inadvertido y lo venderá por más de lo que vale. ¿Os huele a hipoteca basura?
Steve D.Levitt también plantea un aspecto muy interesante en ‘Freakonomics’, y es que la irrupción de Internet ha perjudicado la asimetría informativa. Hoy en día cualquiera de nosotros puede acceder a la información que puede interesarnos ya que Internet ha reducido la distancia entre expertos y público. Cada vez resulta más difícil usar la información privilegiada por parte de los expertos, que hasta ahora la utilizaban en detrimento de nosotros. Después de escuchar la oferta del vendedor de coches, podemos navegar por Internet en nuestra casa y averiguar hasta qué punto la compra no sería tan buena.
Pero como podemos comprobar en estos días, herramientas como Internet no han evitado la asimetría informativa que ha provocado esta crisis. Hipotecas basura, deudas encubiertas, doble contabilidad, activos inflados, manipulación de mercados, ocultación de honorarios,... Los culpables de la actual crisis han ocultado información verdadera y difundido otra falsa, haciendo todo lo posible para que la asimetría informativa se mantuviera cuanto más asimétrica mejor. ¿Soluciones posibles? Supongo que establecer mecanismos para que todos tengan las mismas oportunidades para acceder a la información, y que esta sea lo más veraz posible. Y creer en esto es como creer en el título de aquella película de Manuel Summers: “To er mundo e güeno”.
5 comentarios:
De las causas de la crisis y por qué afecta más a Europa que a EEUU no me he enterado.. pero del resto sí. Lo cierto es que la gente lleva mucho tiempo aprobechandose de esta asimetría informativa, aunque yo no sabía que tenía nombre propio... En fin, creo que tú, desde este blog, estas reduciendola un poquito..
Perdona myriam. He completado la cita y ahora creo que es más comprensible.
La verdad que tus posteos son casos a descubrir al menos esta es la segunda o tercera vez que me pasa. Saludos!
Muchas gracias, ahora ya lo entiendo mejor.
Myriam, supongo que conoces el artículo llamado "la crisis ninja" de Leopoldo Abadía. Si no es así te lo recomiendo. Es todo un 'boom' en internet. En él se explica muchos de los intringulis de esta crisis:
http://leopoldoabadia.blogspot.com/search/label/%2B%20ANEXO%201%20Crisis%20NINJA
Publicar un comentario